Laregla De Chargaff sobre “fenómenos” y frustraciones

Hace unas semanas, polaroid, desde la butaca del salón de Japón, dijo algo que me sentó mejor que tres nolotiles y tres cubatas en un día de dolor de muela. Polaroid dijo: la fuente de todos los males son las frustraciones. Hay que aprender a superarlas.

Hay gente que lo hace todo genial.

-En la guarde son los primeros que aprenden a andar, a hablar… hacen pipí/caca en el water, mientras los demás todavía no consideran la importancia morfofuncional de los pulgares oponibles.

-En el cole… entre los primeros de la clase, les atribuyen superpoderes como la memoria fotográfica, vista de rayos laser, telepatía. Los primeros en educación física y los mejores actuando, bailando, cantando en el espectáculo de fin de curso.

-Entre los más guay del Instituto. Tienen un montón de amigos.

-Las notas más altas de la clase en la carrera, se llevan todas las becas. Les contratan que todavía no son licenciados.

-Viajan, aprenden idiomas que no han estudiado (olvidando otros que si han estudiado… (se la ví - jejeje) …durante años.

-Se sitúan en donde querían situarse, en un trabajo precario pero genial.

Pero también hay que pensar que a estos “fenómenos” les pasa que en la guarde a los demás les importa tres pueblos lo de la caca y la pipí en el water… los demás también saben andar y correr y con esto tienen de sobra a la hora de perseguirles por el patio y tirarles pedradas… (malditos pulgares oponibles!)

En el cole por muy bien que actúen, canten, bailen… no aprenden a tocar el piano… y las clases de clásico para aprender a bailar de verdad y subirse a las puntas son muy caras...

En el Instituto… por muy bonitos que sean los ojos verdes, siempre aparecen unos ojos azules y unas pestañas más largas que los desbancan… y muchos amigos… pues, se revelan no ser muy amigos.

Sacan las notas más altas, eso es verdad… pero casi no salen a la calle y casi no viven. Los contratan pero los esclavizan durante un tiempo… Viajan a sitios geniales que les entran en el alma y aprenden idiomas que nunca controlaran completamente, viven malentendidos y gaps lingüístico-culturales a diario. Si se sitúan, pero en el lugar equivocado, y aunque el trabajo sea genial… no lo llevan como quisieran. Descubren que la memoria fotográfica no sirve casi de nada sin la memoria procedural.

Hay cosas que estos “fenómenos” superan: Las pedradas, la falta total de talento musical, las clases de clásico a las que nunca pudieron atender, aquellos ojos azules, los amigos que no eran amigos, la falta de vida social durante la carrera, el trabajo no remunerado, los malentendidos lingüístico-culturales. Cosas que pasan, que fortifican. Que son importantes justo en el instante en el que se cumplen. Al día siguiente ya no lo son. Relativizan, olvidan.

Por otro lado hay cosas que cuesta más trabajo superar. Por ejemplo el fracaso profesional… la sensación insoportable de que cada día es un paso más hacía la destrucción total de todo tipo de esfuerzo. La certeza absoluta de que nada ha servido de nada.

Pero estos “fenómenos”, aunque por un lado lo pasan fatal, por otro siguen luchando. Intentan levantar cabeza pensando que sus vidas son geniales y que son afortunados. Que tienen de sobra, que tienen hasta cosas que nunca han merecido. Se esfuerzan, quieren ser optimistas y hay días en los que piensan que el día de mañana puede que sea un paso hacía la recuperación y no necesariamente hacía el fracaso. Estos “fenómenos” viven unas montañas rusas diarias durante periodos indefinidos.

Outing: soy una de esos “fenómenos”. Y actualmente conozco mi situación real. Voy hacía el fracaso total. Pero no pasa nada. No es lo que he deseado durante estos últimos años. Pero me da igual. Voy a seguir trabajando con dignidad y seriedad. Voy a seguir aprendiendo y viajando. Creo que soy afortunada. Creo que soy hasta feliz, feliz de una felicidad egocéntrica:

Fase 1 de la felicidad egocéntrica: ESTAR BIEN CON LO QUE NOS RODEA: disfruto de la compañía de personas que siempre me ayudan, siempre me apoyan, que hacen que no esté sola ni siquiera cuando me siento sola. Por ellas lo hago todo.

Fase 2 de la felicidad: ACEPTAR NUESTRA CONDICIÓN/SUPERAR LAS FRUSTRACIONES: aunque sé que no me sale muy bien lo que hago, sé que al fin y al cabo me gusta (por lo menos que en sus días me gustaba); que no será para siempre, con lo cual voy a poder cambiar y hacer algo que quizás me siga gustando y que incluso me salga mejor.

Fase 3 de la felicidad: SER QUERIDOS: para alguien soy alguien y no dejaré de serlo nunca.