jueves, 2 de diciembre de 2010

Laregla De Chargaff: “La utilidad de la segunda persona singular”

columpio

Se te quitan las ganas. Pierdes las fuerzas, la esperanza la ilusión. No te apetece hablar, no quieres escuchar, retienes la información por osmosis y en seguida te saturas. Te vuelves insoportable.

Buscas asilo entre los brazos de lo que más te asusta. Buscas a la Soledad, le suplicas que empape tu corazón de indiferencia y egoísmo. Quieres que te haga independiente del resto de los seres humanos. La odias, la evitas, relativizas, levantas cabeza, pero al final siempre acabas llorando en su hombro. Te preguntas: como es posible?

La respuesta es sencilla. Clara como el agua. Realmente no buscas a la soledad. No vas hacía ella. Es que la llevas dentro. Alberga en tu corazón, vive en una herida más antigua de lo que tu mismo puedes imaginar; intentas esconderla, encerrarla…  pero ella sube a la superficie con facilidad. Te controla, te hace inestable, te hace huir y te hace más solo todavía. Es un bucle, es una tortura. Es lo que hay.

No intentéis sacarle del bucle, sería como abrir la caja de pandora… dejadle. 

LDC

4 comentarios:

  1. la utilidad de la primera y la tercera persona singular2 de diciembre de 2010, 17:38

    voy y la llamo y miro sus fotos de niñas que duermen y sus fotos de niñas que bañan a sus muñecas y sus fotos de gente borracha y mis fotos de caras imposibles. si se va y coge el coche no hay problema, es solo un tiempo, preferiría que alguien fuera en de copiloto, para leerle el mapa y ponerle canciones, tal vez yo, tal vez él, tal vez ello, tal vez ella. le diría que su miedo, el miedo a estar solo, es el único miedo que existe, que me pasa a mi y le pasa a ella y a mi padre y a chuck norris. le diría que los bucles, quedar atrapado en corrientes circulares en el tiempo es una putada pero PASE (1. sucede 2. desaparece). le diría muchas cosas inservibles por si sirven, por si acaso.

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  2. a medias entre españoles por el mundo y este post, el último ha ganado. Y lo he visto claro aclamada LDC: lo que le recomiendo es que escoja una prenda de entre su vestuario y cada vez que se sienta así, se la ponga como amuleto mágico.
    Así se dará Vd. cuenta de dos cosas:
    1- de que aunque el with a little help from my friends se publicó en el 67, en estos días es lo que le obligo a ponerse en su walkman (porque las offsis molan más porque llevan walkman)
    2- que con Pedro León, otro gallo hubiera cantado en el Camp Nou...

    Eso sí, no le diga el color a sus otras dos cómplices en éste blog que tanto nos ayuda a los biofrutas porque si no cada vez que la vean con la prenda le van a preguntar que qué le pasa y entonces se agobiaría más.

    yo creo que un azul le iría bien

    un cálido abrazo, todo lo cálido que se puede a -6 grados

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  3. ...Ese peazo Inspectó, si señó!

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